Una Guerrilla joven conquista Granma (+Fotos y video)

en-dos-rc3adosAntes, no entendía ese instinto casi suicida de forzar el cuerpo hasta los límites, el deseo de sentir cansancio, sudar…. Los miembros de la “Guerrilla joven”, integrada por blogueros, activistas de redes sociales y periodistas de varias provincias del país, lo hacemos con frecuencia y, en el camino, nos volvemos más hermanos.

Del 21 al 25 de octubre, recorrimos parte de Granma, guiados por el deseo de palpar esencias de la nación, en un territorio con más de 600 sitios históricos identificados y señalizados, incluidos 23 monumentos nacionales.

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En el Museo Casa Natal de Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo.

En la Casa del Padre mayor, Carlos Manuel de Céspedes, iniciamos la aventura que nos llevó hasta el Museo de Cera, el Pico Turquino, donde celebramos una boda, Las Coloradas, Cabo Cruz, la casa natal de Celia Sánchez, en Media Luna, Dos Ríos…, pero escrito así parece muy fácil. Y, en verdad, las peripecias pudieran motivar hasta películas. Algunos las catalogaron como extremas, aunque no debemos exagerar.

CAMINO AL TURQUINO

Cerca de las 7:00 de la noche llegamos al campamento de pioneros Che Comandante, en Bartolomé Masó, bajo una llovizna, final del aguacero que había caído. Allí nos recibieron la subdirectora y otros trabajadores, con sonrisas y amabilidad.

“Aquí llueve todos los días, subir es complicado en estas condiciones”, nos alertaron, pero estábamos decididos: Veríamos al Apóstol en lo más alto.

Baños, comida, charlas, chistes y apenas unas horas de sueño, porque a las 2:00 de la madrugada salimos rumbo al Parque Nacional Pico Turquino, en Santo Domingo.

Quien estaba al frente de la instalación, un señor delgado y bastante serio en aquel momento, nos dijo: “Es casi imposible que lleguen. El sendero está en pésimo estado y, después del mediodía, cae cantidad de agua”, sin embargo, la tropa no se amilanó.

Y él recalcó: “Para lograr ese propósito deben caminar 18 kilómetros hasta la cima, más cinco de retorno al campamento de Aguada de Joaquín. Sumen el fago y el casi seguro aguacero. No están acostumbrados a tanto”.

Y era cierto, pero seguimos loma arriba.

El trayecto incluyó caídas y esa mezcla de cansancio, sudor y resequés en la boca, que combatimos con caramelos y refresco.

El punto más alto de Cuba, ubicado a más de 1970 metros sobre el nivel del mar, parecía alejarse cada vez más, sin embargo, la voluntad resistía.

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En la cima del pico Turquino.

Y teníamos una motivación adicional: la boda de Rodolfo Romero y Karen Alonso, dos habaneros llenos de sueños, de la cual les contaré en otra oportunidad.

Desafortunadamente, todos no llegaron, pero hubo intercambio de anillos y hasta brindis en la cima. Admiramos el busto de José Martí, obra de la escultora Gilma Madera y símbolo para quienes amamos los retos y el país, colocado allí por Celia Sánchez Manduley y su padre, Manuel., en 1953.

Cuando el motor del camión bramaba para subir una de las tantas pendientes -como expresó uno de los participantes-, ya de regreso desde Santo Domingo hasta Caney de las Mercedes, pensaba en la sensación de desafío eterno que implica el Turquino y hace que algunos quieran subirlo otra vez, aunque haya faltado el aire y dolido los músculos.

Parecía que lo difícil había concluido y solo nos restaba compartir en el campamento de pioneros Desembarco del Granma, en Las Coloradas, Niquero, y con pobladores de Cabo Cruz. Además, adentrarnos en otros sitios históricos, ubicados en el llano.

Sin embargo, los programas de los eventos son apenas palabras escritas. Hasta las tres y pico de la madrugada estuvimos con la guagua rota en Manzanillo.

guagua

A las 6:00 de la mañana llegamos a Las Coloradas, hora ideal para comer, cuando no se ha hecho, y dormir al menos tres horas. Su director y los demás trabajadores nos atendieron como si fuéramos su familia.

Cabo Cruz nos proporcionó uno de los momentos más especiales: el intercambio con los pioneros de la localidad y con Roldán Hernández, miembro del destacamento Mirando al mar. Allí realizamos una iniciativa tradicional del grupo: El estanquillo Patria, consistente en obsequiar semanarios de cada provincia, libros de cuentos, temperas, lapiceros, revistas, juegos, las únicas dos ediciones del periódico Granma a color….

OTRA VEZ JUNTO AL HÉROE NACIONAL

 

El domingo, 23, fuimos al encuentro del Héroe Nacional en Dos Ríos, donde cayó el 19 de mayo de 1895. La historiadora Nubislaidis Rosel narró lo sucedido aquel día y cómo el primer obelisco fue constituido con piedras, depositas por mambises.

Nos fuimos a la orilla del río Contramaestre a buscar otras y ponerlas en el lugar, como expresó Máximo Gómez que debían hacer los cubanos dignos que llegaran allí.

Estaba crecido y había fango, pero el compromiso con nosotros mismos, la historia y nuestros sentimientos era más fuerte que todo.

La tarde de ese día estuvo cargada de abrazos y despedidas. Ahora, como Itsván Ojeda, periodista de Las Tunas, me quedo con el sabor agradable de juntarme con gente especial y de haber conocido a Rafael y Bernardo, trabajadores de la Empresa de Flora y Fauna, en la Altura de Joaquín, o a colectivos geniales como los de los campamentos Che Comandante y Desembarco del Granma.

Como Lilibeth Alfonso, de Guantánamo, escribo que amé la experiencia, sus retos y las personas en el camino. Granma es una provincia que encanta. (Por: Yasel Toledo. Tomado del blog Mira Joven)

 

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